jueves, octubre 07, 2010

POR EL SENDERO INVIABLE


Camino con extremo cuidado
seguro de no ceder ante el error,
sin precipitarme contra los objetos
sin conocerlo todo,
-condicionado a la memoria anulada-
sin apropiarme de algo que no me servirá.

Doblo en los caminos que son verticales,
abro las manos que parecen odiar y resistirse, 
miro por debajo 
respiro en modo de precaución,
sospecho y sin embargo sin el aliento corriente
me aseguro de permanecer atento
dispuesto para acciones prepotentes
con mi contenido de palabras salvajes
y impulsivas reacciones cultivadas de atiborrada humanidad.

El comportamiento descabellado,
no pertenece a nada,
las escrituras del tiempo no albergan inconformidades,
mi inconsecuencia intenta confundir
los propósitos son siempre una costumbre insaciable:
tocar lo distante 
sobrevivir con dignidad en el vacío
conmover en el frente el control de las élites subjetivas 
con todo puesto encima y la libertad de no ser.

Las condiciones de desposeerse,
de atinar a la composición relativa,
de sentir con misticismo,
mientras las influencias te van embarcando permanentemente 
hasta acogerte en la comodidad de la miseria sincrónica.
Mis respuestas serán insobornables
desde la consciencia que todavía da gracia a ese albedrío intimo
se irá proyectando la naturaleza expuesta
y los honores a los cuales
en la trayectoria del estado perpetuo 
el poder absoluto pueda verse desestabilizado
por esa colosal resistencia de una simple voluntad a contracorriente.