viernes, octubre 16, 2020

PUESTO EN EVIDENCIA

La luz en mi rostro como si estuviera oculto.
Esto parece ser una imitación,
no irrita imaginar,
es tácito el punto de vista
como una pintura emitiendo interpretaciones
ante un clima seco, 
y donde solo hay luz sesgada, 
luz temerosa
rindiéndose a cualquier entendimiento,
el clima no se manifiesta,
la naturaleza no se sintetiza…

Está puesto en marcha un escenario
que nada afecta y conlleva misterio,
si llega a suceder algo
especulando una gran irrupción
las consecuencias serán evidentes desde una lógica habitual
aunque no corresponda percibir de tal forma
aunque no sirva precisar explicaciones abstractas.

Se altera el drama estético,
un movimiento aterrador,
la enésima proliferación del final,
angustias retorcidas que tanto nos obligan a decaer
en situaciones bajo censura. 
Asentir que todo va estupendo,
región misteriosa,
un invento de entorno insensible,
luz justificada de radiación y agresividad,
sombras constantes por debajo de una vida sólida,
estancada,
esa que no deja representar para mi
atributos de autocontrol inexpresivo
por una vía distinta,
idealismo de mi paranoia en reposo,
en condición de ansiedad ambulante, 
desentrañando piezas absurdas,
el reflector directo a las evidencias 
un rostro desconcertado por el encanto de utopías…