y por tal merece prestarle total atención,
cuánto se supone, lo que es prohibido mencionar
uno en frente del otro asociando adjetivos para una falacia cómoda;
posesiones para el más predispuesto
y reconocimiento al más sutil.
Juicios, estereotipos, imágenes enlazadas a experiencias pasadas
traspasan la cabeza con el ventilador encendido.
Es oportuno retroceder ante cualquier impulso que intente romper el cristal.
Los gritos también envejecen y se enferman,
si no se puede contravenir las acciones
dejaré que el agua se encauce por propia composición,
no pienso intervenir de manera amigable
un punto de vista no equivale a un hecho probado,
no tiene objeto una decisión precipitada
cuando es evidente que todo acto insurrecto debe menguar ante la diferencia.
Las miradas no se pueden sostener en un punto fijo,
las prendas húmedas también secan con calor corporal,
el temperamento tiene manos gigantes
y la capacidad del cerebro se incrementa
cuando despertamos insomnes cual fantasmas del amanecer,
todo funciona como pieza de relojería
el firmamento se encierra simétrico bajo formulaciones
en niveles inimaginables sin resolver,
vacíos de codificación, agujeros sin entramado
para quien vive esperando una respuesta a su existencia.
La necedad es virtud,
es válido afirmar que la demagogia también te emocionará,
y doblegará las rodillas a quien diga yo, ¡jamás!
Cada uno tiene un precio
señalando o maldiciéndose,
el mundo sigue dando vueltas
nadie entiende su inexorable maquinación aunque diga lo contrario,
una mano visible escribe, la otra oculta, borra lo hecho,
el corazón pretende siendo tal vez pretencioso
y la cabeza elabora en silencio un plan autodestructivo.
Con tan solo una firma se consiente
y con apenas un examen teórico a contrarreloj
alguien semejante de igual naturaleza
puede influir en una condición emocional para siempre,
nunca más llorar resignado en humildad
se sedimenta las intenciones de un arte nuevo al abrir las cortinas
se despojan inhibiciones de siempre
hay un cambio brutal solo con quererlo
el viento barre conceptos pusilánimes y melancolías,
con el correr de las horas y las vistas
se viralizan tantas miserias como podamos imaginar,
a la velocidad de la luz.