(versión corregida 3.0)
No fue moral;
en ocasiones se manifiesta la
insurrección que sin saber leí,
las aspiraciones arquitectónicas que se
incendiaron con la ira de la sangre,
la excesiva prudencia, aunque esa no
fuera la palabra, solo un reflejo de retraimiento.
El conjunto de todos los golpes
(Numeraciones y otros estados de
abstracción),
abordar de partes distintas
apresurarse en intenciones de doble
personalidad
y llegar al acuerdo –contrastando–
el resultado de una posible fórmula
a la sombra del éxodo –solo Dios lo sabe–.
Está llegando la calma, el desasosiego,
la saciedad, derivarse...
Partiduras y enfoques psicológicos,
la exploración en la memoria de los
idiomas y la generación extinta;
grandes sabidurías meditadas en el vicio
sorteando deseos, evidenciando
formalidades por el show
de cuerpos abstractos, vejaciones, iterar,
bifurcar, de estética pura...,
intentando clasificaciones,
vivir de algo
del tiempo bendito y la temperatura
contaminada.
Figuras evidentes desde un malestar,
las grietas que da el mundo
y los objetos convertidos en geometrías extrañas
sin trazo visible;
las formas que me son difíciles de controlar,
las inclinaciones de ayer y las que me
persiguen por siempre,
la rutina interna –engullido–,
el 3 subiendo con
cuidado para no despertar temores,
el 0 cuando no siento
nada porque es nostalgia y me voy,
y el 8 por completar un
lugar que se mantiene muerto
sin rastros, ni pruebas, sin virtudes
razonables…, porque se acabó la inocencia;
eso sí, elemental y típico, opuesto pero
reinante desde posiciones inciertas.
La gracia de sentir de este modo,
enumerando ritmos / encasillando diversidades
congregando todo aquello en espirales cruzados;
en tanto los efectos colaterales de
distracciones
siguen cuajándose con el propósito de
iniciar búsquedas
atrás en la melancolía
o adelante en un momento fortuito.